Campaña del PST enfrenta restricciones en Tennessee

POR JOHN STUDER

NASHVILLE, Tennessee—“En Tennessee, en los estados del sur y a nivel nacional, los gobernantes capitalistas están atacando el derecho al voto de la clase trabajadora, especialmente el de los trabajadores que son africano-americanos”, dijo a la prensa Alyson Kennedy, candidata presidencial del Partido Socialista de los Trabajadores, en esta ciudad el 18 de agosto. “Su requisito de documentos de identificación con fotografía para votar, las purgas agresivas de las listas de votantes y otras restricciones están destinadas a privar de sus derechos a los trabajadores y pequeños agricultores.

“Este ataque también afecta a nuestro partido”, dijo Kennedy, “porque priva a los trabajadores aquí de ser tomados en cuenta cuando firman para que aparezca el PST en la boleta electoral en noviembre”.

Los partidarios del PST entregaron 569 firmas el 8 de agosto, pero la oficina del secretario de estado de Tennessee dijo que solo el 30 por ciento de ellas eran válidas. “Respondimos haciendo más campaña, colectando un total de 1 060 firmas”, dijo Kennedy.

Un reflejo del apoyo que se ganó para el PST es el hecho de que cuando empezamos a hacer campaña solamente había un subscriptor al Militante en el estado, hoy hay 80.

Tras la decisión de la Corte Suprema en 2013 que socavó la Ley del Derecho al Voto de 1965, las autoridades de Tennessee aprobaron una ley que restringe el derecho a votar.

Las nuevas reglas excluyen a personas que han votado durante años. Un caso célebre es el de Dorothy Cooper, de 96 años de edad, una mujer negra que había logrado votar durante toda su vida, incluso bajo la segregación racial del Jim Crow. Ella perdió ese derecho porque el nombre en su identificación es su nombre de casada y no tenía una licencia de matrimonio.

Su situación atrajo la atención de los medios y el comisionado estatal tuvo que instruir a los funcionarios electorales de que le entregaran la identificación que necesitaba.

Las guerras en el Medio Oriente están en las mentes de muchos trabajadores. “Me desgarra ver lo que está pasando en Siria”, dijo Michael Harden a Arlene Rubinstein cuando ella golpeó a su puerta en Nashville. “Me siento como que hemos estado en guerra toda mi vida. Los políticos nos dicen que van a poner fin a la guerra solo para después decirnos que no es el momento de hacerlo. Este sistema necesita las guerras para sobrevivir. Los trabajadores necesitamos acabar con los guerras para sobrevivir”, dijo Harden.

“Envían a los trabajadores al extranjero a pelear y morir por el sistema de explotación capitalista desde Iraq a Afganistán”, dijo Kennedy. “Regresan heridos y agotados, de guerras impopulares que no terminan nunca, para encontrar condiciones de depresión, pocos trabajos y la indiferencia de los burócratas y el desprecio de la Administración de Veteranos. El Partido Socialista de los Trabajadores dice ¡traigan a todas las tropas a casa ahora!

“Hoy día, cuando la crisis impulsa a los gobiernos capitalistas hacia conflictos cada vez más profundos, muchos de ellos, con Washington al frente, están armados hasta los dientes con armas nucleares. El PST exige el desarme nuclear unilateral de Washington y lucha para tomar el poder político de manos de los guerreristas imperialistas.

“Nuestro partido es su partido”, dijo Kennedy a los trabajadores. “Vota por lo que QUIERES, aunque no lo obtengas hoy, no votes por lo que NO QUIERES, lo cual garantiza que vas a seguir recibiéndolo”.

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