Vol. 74/No. 43      15 de noviembre de 2010

Las autoridades dicen que los paquetes —uno enviado por Fedex y el otro por UPS— tenían cartuchos para impresoras llenos de explosivos y fueron interceptados el 29 de octubre en Dubai y en el Reino Unido. La secretaria del Departamento de Seguridad del Suelo Nativo, Janet Napolitano declaró que los paquetes tenían las “características típicas de al-Qaeda, particularmente las de al-Qaeda de la península arábiga (AQAP)”, la cual está basada en Yemen.

“Expertos en antiterrorismo” de Estados Unidos llegaron a Sana’a, la capital de Yemen, el primero de noviembre para participar en una ofensiva militar contra AQAP en dos provincias, informó Xinhua. Sana’a ha evitado llevar a cabo una guerra total contra AQAP porque grupos islamistas como este han ayudado a contener a fuerzas independentistas en el sur del país y a los rebeldes houthi en el norte que enfrentan la discriminación del gobierno.

Mientras tanto, un tribunal yemení comenzó un juicio in absentia de Anwar al-Awlaki, un ciudadano norteamericano acusado de ser dirigente de AQAP en Yemen. Es acusado de conspirar para matar a extranjeros. El presidente Barack Obama ha ordenado su asesinato.

El gobierno yemení detuvo, y luego dejó en libertad, a una mujer en Sana’a acusada de enviar los paquetes. Fue puesta en libertad después de que compañeros de la Universidad de Sana’a, muchos de ellos mujeres, se manifestaron declarando su inocencia. Funcionarios del gobierno luego declararon que parece que otra persona había usado su tarjeta de identificación.

Antes de los sucesos mas recientes, fuerzas especiales de Estados Unidos ya habían aumentado sus efectivos en Yemen, informó CNN, y la Casa Blanca estaba considerando “la posibilidad de que la CIA realizara operaciones con aviones no tripulados dentro de Yemen similares a los de Pakistán”.

Dentro de Estados Unidos, Napolitano anunció “mejoras” que aumentarían la militarización de los aeropuertos. Algunas medidas, como el aumento del uso de perros y registros, serían visibles, dijo, mientras que otras “serán medidas que no estamos haciendo públicas”.

Los gobiernos de Estados Unidos, Canadá, Francia, Holanda, y el Reino Unido impusieron una prohibición al envío de paquetes desde Yemen. El gobierno alemán también ha prohibido el transporte de pasajeros de Yemen.

Los artículos en la prensa capitalista dan indicios de cómo los sucesos en Yemen serán usados tanto por los patrones como por el gobierno para atacar los derechos obreros. El Boston Globe en un editorial declaró que “aún compañías legitimas pueden ser infiltradas por empleados de poca confianza”.  
 
 
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