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Vol. 74/No. 23      14 de Junio de 2010

 
La nacionalidad negra se
forjó en luchas victoriosas
 
A continuación presentamos la parte siguiente de una serie que el Militante está publicando con extractos del nuevo libro Malcolm X, la liberación de los negros y el camino al poder obrero por Jack Barnes, secretario nacional del Partido Socialista de los Trabajadores. Instamos a los lectores a que estudien, discutan y ayuden a vender este libro. Este extracto del capítulo “La liberación de los negros y la dictadura del proletariado” trata de la Reconstrucción Radical, el periodo que siguió a la Guerra Civil en Estados Unidos en el que los productores explotados —encabezados por los ex-esclavos negros y con el respaldo de las tropas de la Unión— tomaron pasos hacía el establecimiento de gobiernos populares y democráticos que avanzaran los intereses de clase de todos los liberados, pequeños agricultores y otros trabajadores. Copyright © 2009 Pathfinder Press. Se reproduce con autorización.
 
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Si la Reconstrucción Radical no hubiese sido derrotada, y si la lucha por los “40 acres y una mula” hubiese triunfado, entonces no estaba predestinado que los esclavos liberados hubiesen surgido como nacionalidad oprimida para fines del siglo XIX. Eso es cierto. Habrían formado parte de un vasto movimiento social proletario combativo de trabajadores, agricultores libres y ex esclavos.

¡Pero lo que forjó la nacionalidad negra en Estados Unidos no fue lo que Farrell Dobbs acertadamente denominó “el peor revés” en la historia de la clase trabajadora estadounidense! La nacionalidad negra se forjó, no mediante una derrota sino por la capacidad, la actividad de lucha de clases de vanguardia y la conciencia social y política de los esclavos emancipados. Se forjó a medida que utilizaron su libertad para transformarse de esclavos en trabajadores y agricultores de vanguardia, en hacedores de historia, en los que actúan.

El aplastamiento de la Reconstrucción Radical fue una contrarrevolución sangrienta que llevaron a cabo bandas derechistas armadas como el Ku Klux Klan, los Caballeros de la Camelia Blanca y otras más…

Esa derrota no solo cerró la puerta a toda nueva extensión radical, popular y plebeya de la revolución burguesa norteamericana profundizada por la Guerra Civil y por la eliminación de la esclavitud; hizo que se diera marcha atrás por casi un siglo…  
 
Historial de logros
Después de la Guerra Civil, los trabajadores y agricultores que eran negros lucharon por impedir la reimposición de cuadrillas de trabajadores por contrato, bajo condiciones cercanas a la esclavitud, en campos de cultivo por todo el Sur. Lucharon por tierras. Libraron batallas durante la Reconstrucción Radical por escuelas, el sufragio, créditos baratos y servicios de extensión agrícola, y otras necesidades del pueblo trabajador en su conjunto. Organizaron una resistencia armada frente a los violentos ataques derechistas contra los gobiernos estatales de la Reconstrucción.

Los gobernantes capitalistas pretenden ocultar la historia de la Reconstrucción Radical, igual que tratan de ocultar la historia de las batallas obreras en este país. Aparte de los cuentos sobre los escandalosos “scalawags” del Sur y los tristemente célebres “carpetbaggers” del Norte, en la escuela no nos enseñaron, en la mayoría de los casos, mucho más que eso sobre el tema de la Reconstrucción. Quieren encubrir la verdad porque esta hace añicos todo concepto racista y antiobrero de lo que pueden lograr los negros, de las posibilidades de forjar alianzas combativas entre trabajadores y agricultores que son negros y blancos, y mucho más. Esa falsificación solo comenzó a desmoronarse a gran escala gracias al ascenso de un movimiento proletario de masas dirigido por negros…

Asimismo, pequeños agricultores y trabajadores asalariados que eran blancos participaron en las luchas que caracterizaron la Reconstrucción Radical. Las conquistas sociales de los regímenes de Reconstrucción más avanzados, como en Carolina del Sur, fueron sumamente populares entre las masas trabajadoras, independientemente del color de su piel. Muchos pequeños agricultores y trabajadores asalariados en las sierras y otras regiones por todo el Sur jamás habían apoyado la esclavitud. Opusieron resistencia a la Confederación durante la Guerra Civil, y a veces hasta rechazaron la conscripción y el pago de impuestos especiales. Después de la guerra se dieron cuenta de que nunca antes habían tenido gobiernos locales parecidos a muchos de los que surgieron durante la Reconstrucción. Nunca habían tenido un gobierno que les brindara educación pública gratuita, que les ayudara a obtener préstamos de bajo interés, que estableciera escuelas de agricultura y enviara asesores agrícolas itinerantes a las zonas rurales. Todo eso fue muy popular.

Tras la derrota de la Reconstrucción Radical, los negros libraron incontables escaramuzas —durante las décadas de 1880 y 1890 y hasta entrado el siglo XX— contra la imposición de la segregación Jim Crow y del terror racista por todo el Sur. Lucharon para poder retener su tierra, y aún siguen luchando. Y han estado en la vanguardia de todas las luchas sociales y políticas con dirección proletaria en el siglo XX que hemos señalado.

Este historial de lucha es lo que forjó inicialmente a la nacionalidad negra. Fue producto de una conquista política positiva, no de una gran derrota histórica. Fue a partir de estos logros suyos, no de su opresión, que se fraguó la nacionalidad negra. Fue muestra de la conciencia de su propia valía política.  
 
 
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