Vol. 73/No. 9 9 de marzo de 2009
La guerra contra el terrorismo no es la política del presidente anterior, George Bush, o de Obama, es la política del imperialismo estadounidense, independientemente de quien ocupe la Casa Blanca.
Los ataques contra Pakistán y el incremento al doble de las tropas en Afganistán son parte de la misma guerra. Agrege la tortura de prisioneros en Guantánamo y en las cárceles de la CIA por todo el mundo y los traslados de supuestos terroristas, muchos sin ninguna evidencia en su contra, y verá lo que los gobernantes quieren decir cuando hablan de la guerra en contra del terrorismo, una advertencia a cualquier trabajador que se atreva a luchar contra la explotación capitalista.
El propósito de su guerra es defender el imperialismo de Washington en decadencia, el último imperio del mundo. Washington es cada vez menos capaz de estabilizar un mundo en el que las vidas de millones de trabajadores están marcadas por inquietudes, carencias y enfermedades producto del capitalismo.
Los ataques de misiles, los adiestramientos de fuerzas especiales y los ¨traslados¨ secretosuna palabra en codigo para los secuestros autorizados por Washingtontienen como propósito impedir que los trabajadores y agricultores en Pakistán y Afganistán organicen una lucha eficaz para confrontar a las clases capitalistas y terratenientes de la región.
Es por eso que los trabajadores con conciencia de clase deben exigir que se retiren las tropas y asesores de Washington de Pakistán y Afganistán, que se cierren todas las bases de Estados Unidos, que se liberen a todos los prisioneros y que cierren todas sus prisiones secretas. Los gobernantes se preparan para responder a la resistencia que se va a extender dentro de Estados Unidos a medida que las consecuencias de la crisis económica capitalista caen sobre los trabajadores y agricultores.
Al oponernos a la intervención de Washington en Pakistán, Afganistán y otros lugares del mundo, los trabajadores nos ponemos en una posición mejor para defender nuestros derechos democráticos, políticos y sindicales en los meses y años venideros.
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