Vol. 72/No. 21      26 de mayo de 2008

Los noticieros de televisión mostraron a la multitud joven y ruidosa que gritaba “ICE go home”, “No somos criminales”, “No nos rendimos” y “Sí se puede” a la entrada del recinto de la feria ganadera Cattle Congress en Waterloo, a 80 millas de Postville.

Unas 200 personas se manifestaron aquí el día antes cuando llegaron autobuses de Homeland Security (Seguridad del Suelo Nativo) llenos de presos.

En lo que fue la mayor redada de inmigración en la historia de Estados Unidos, unos 500 policías de agencias federales, estatales y municipales allanaron la fábrica el 12 de mayo. Los agentes tenían una orden de registro criminal contra trabajadores que supuestamente usaban números falsos de Seguro Social, así como una orden de registro civil contra trabajadores que según el ICE residen ilegalmente en el país.

Según una declaración jurada del gobierno, “aproximadamente el 76 por ciento de los 968 empleados de Agriprocessors usaban números falsos o fraudulentos de seguro social en relación a su empleo”.

El gobierno federal alquiló el recinto de la feria varias semanas antes en preparación para la redada. De los arrestados, los hombres están detenidos en los establos para ganado en el recinto ferial y las mujeres están encerradas en cárceles municipales, según informó una estación local de televisión.

Entre los manifestantes había estudiantes de secundaria, obreros de la empacadora de carne de Tyson, y trabajadores y jóvenes negros, blancos y latinos.

Los manifestantes vitoreaban cada vez que pasaban autos que daban bocinazos de apoyo. Matt Stewart, un trabajador de la pizzería Domino, dijo que cuando vio lo que estaba pasando, estacionó su auto y se sumó a la protesta. Lo que está haciendo el ICE es “asqueroso”, dijo Stewart. “Ellos no les dan a estos trabajadores un proceso para hacerse legales”.

La planta de Agriprocessors en Postville, el matadero kosher más grande de Estados Unidos, procesa carne de res y de pollo. Según el diario judío Forward, pertenece a la familia Rubashkins de Brooklyn, Nueva York.

En una series de artículos en los últimos años, Forward ha informado sobre el deterioro de las condiciones de trabajo, las lesiones y los bajos salarios en la planta, así como las protestas obreras, incluso un paro de labores de varios cientos de trabajadores en 2007. El diario también ha informado sobre los intentos del sindicato UFCW de organizar la planta y los esfuerzos de Agriprocessors de aplastarlos.  
 
 
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