Unos 15 mil trabajadores de la Goodyear —el fabricante más grande de llantas de Estados Unidos— están en huelga desde el 5 de octubre en 12 plantas de Estados Unidos y cuatro en Canadá. Los trabajadores salieron en huelga para protestar contra recortes salariales de hasta el 40 por ciento, la eliminación de las prestaciones médicas para los jubilados y los planes de la empresa de cerrar sus fábricas en Alabama y Texas, incluyendo la de esta ciudad.

Muchos de los huelguistas se mostraban satisfechos por la participación, especialmente después de las noticias de los pasos tomados por la empresa para romper la huelga. Goodyear ha contratado a Mordern Industries Services (MIS), un grupo antisindical, para empezar a reunir una fuerza rompehuelgas de “trabajadores temporarios”.

La gigante llantera también ha comenzado una campaña publicitaria para ganar apoyo para su uso de rompehuelgas. “Goodyear está añadiendo selectivamente trabajadores temporales en las plantas afectadas para continuar sirviendo a sus clientes”, explica un comunicado de Ed Markey, un vocero de Goodyear. “Entre los productos críticos están los artículos que necesitan las fuerzas armadas estadounidense en su guerra contra el terror por todo el mundo”.

Cuando se le preguntó sobre la forma en que la empresa usa el patriotismo para hacer que los huelguistas vuelvan al trabajo, Bren Riley, vicepresidente del Local 12L, dijo al Militante, “No. No vamos a dejarnos llevar por eso.” Riley dijo que la empresa puede terminar la huelga si quisiera y seguir produciendo llantas.

“La clave ahora es la solidaridad”, dijo Riley. “El Local 12 tiene una larga historia de ayudar a otras huelgas, apoyo que se nos devolverá multiplicado por 10. Los trabajadores de B.F. Goodrich en Tuscaloosa y Opelika ya están dándonos su apoyo.
 
 
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